sábado, 26 de agosto de 2017

De como Helena logra caer siempre parada cual gato

 Acá arriba, Hele, viva desde chiquita. Y en la siguiente foto yo...
De como Helena logra caer siempre parada cual gato...John Austin en "How to make things with words" nos lo explica...

- TENGO HAAAAAMBREE !!!
- Camila, no ves que estoy cocinando? ESPERAAAA....
- Siempre me tratan mal, siempre me hablan mal. Helena dice lo mismo y a Helena le hablan bien...

Me voy. Me fui. Me acurruqué en el sillón. Me hice bolita. No quiero que me vean ni ver a nadie.

Al rato mamá viene a hablarme.
- Cami_me dice_ te voy a explicar porque Helena dice lo mismo, pero no la tratamos igual que a vos. Es porque no dice lo mismo.

Mamá sacó el libro "¿Cómo hacer cosas con palabras?" de la biblioteca. Tics que le quedaron de haber cursado Filosofía del Lenguaje, no se sale indenme de esa materia.  

- Austin decía que cada acto de habla, cada frase que pronunciamos implica un acto locucionario que consiste en emitir ciertas palabras con determinado sentido y referencia, un acto ilocucionario (ilo...qué?) que asocia lo dicho con cierta intención (pedir, preguntar, ordenar, etc.) y un acto perlocucionario que es lo que se consigue con lo dicho, el efecto sobre los sentimientos, pensamientos y acciones de quien escucha (en este caso, comer o que mamá se enoje). Hele y vos dicen lo mismo en el sentido locucionario solamente, es decir, expresan la misma idea usando palabras que tienen más o menos el mismo sentido y referencia, pero ahí se acaban las similitudes. Hele dice "Máá" de forma que suene como una canción y, siguiendo la misma melodía, agrega "tengo hambre". Entonces mamá le contesta; "Bueno pollita, ya pronto está la comida"
_ ... (quedé sin palabras ante la viveza innata de Hele)
_ Vení Cami, practiquemos, vamos a mejorar la parte "i" y "per" locucionaria de tu forma de hablar.
_ Mamá, mamá, má 💗
_ Mucho mejor Cami!!! ¿Ves Cami? La filosofía no nos sirve solamente para entender mejor el mundo en el que vivimos. También nos es útil para manejarnos mejor en él. 


 


jueves, 24 de agosto de 2017

Consecuencias de no hacerle caso a mamá. Una posibilidad... entre muchas...

Helena. Otra vez Helena. 
A Helena no le gusta hacerle caso a mamá. Quiere hacer sólo lo que ella quiere y no logra entender porque habría de obedecer a otra persona.
Hoy fuimos a Mc. Donalds. Con lo poco que le gusta a mamá Mc. Donalds. Pero a nosotras "nos encanta": hay pelotero, te regalan un juguete y aunque la comida no es saludable (saludable? Qué signfica saludable?), es rica.
Y salimos de Mc. Donalds y Helena no le quería dar la mano a mamá para cruzar. Y teníamos que cruzar como ocho calles para llegar a casa. Se nota que como a mamá no le gusta Mc. Donalds, decidió vivir en un departamento que estuviera lejos de ahí.   
Ya la notaba cansada a mamá. Ella siempre carga muchas cosas en la cartera, lleva cosas por las dudas, compra cosas, ella siempre dice que es como el camello de Nietzsche. Además siempre nos anda diciendo: cuidado, no pisen eso, mirá que lindo el perrito que pasa y cosas así. También nos cuida para que no veamos nada que nos pueda hacer sentir mal o dar impresión, especialmente a Hele porque es la más chiquita. Pero se nota que esta vez estaba cansada en serio porque al acercarnos a una esquina, en la mitad de la calle, se veía una paloma destrozada por un auto, pero esta vez mamá no le dijo a Helena: "Hele, cruza de este lado" para que no la viera (creo que le seguía diciendo: Helena, dame la mano para cruzar!!!). 
Helena pasó por al lado de la que era una paloma y le preguntó a mamá:
- Mamá, qué es eso? Qué pasó?
Y mamá, muy nerviosa, le contesto:
- Es una paloma que no le hizo caso a la mamá y la pisó un auto.
Helena se quedó pensando. Y al cruzar el resto de las calles que faltaban para llegar a casa, le dio la mano a mamá sin decir nada.
 Acá la personita que no hace caso, comiendo chocolate con carita de "yo no fui"

lunes, 19 de junio de 2017

El confite que tenía que devolver y otros problemas con números

He aquí como, cuando tenía 3 años, resolví algunas de las situaciones difíciles que se me presentaron. Quizás le pueda servir a alguien que esté pasando por alguna similar:
*    Ya había comido bastantes golosinas y estaba negociando con mi mamá alguna cosita más. Mi mamá me dijo: ok, te voy a dar cuatro, más bien, c-u-a-t-r-o confites más y no más por hoy. Y puse mi manito para recibir los confites. Mientras me estaba comiendo el primero, mi mamá exclamó:
- Cami! Te di cinco. Devolveme uno!!
Y entonces, con un dejo de tristeza, le expliqué a Cami:
- Má, pasa que el número 5 es el que ya me comí...

* Le dije a mami:
- Má, ya sé contar hasta twenty!  
- A ver Cami...
- One, two, three.... twenty
- Y en español?
- Uno, dos, tres...... diez!
- Y después de diez?
Me quedé pensando. Cómo era? O más bien, como debería ser eso? Ah, ya sé!
- Unoteen, dosteen, tresteen...... diezteen!!
- No Cami, no es así.
- Sí, mami, estoy segura!!

* En la ruta
- Cami, por enésima vez te repito, dejá de hacer lío.
- Má, estoy aburrida...
- Bueno, entonces contá vacas. O mejor: contá patas de vacas y después dividilo por 4 para ver cuantas vacas hay.
Y preferí quedarme callada...