martes, 8 de mayo de 2012

Actor de reparto gana el Oscar y se queda con todo el protagonismo

Primeros minutos de la película de mi vida. Acabo de salir de la panza y dos doctores me llevan a la sala de al lado para chequear como estoy. Mi papá los sigue. Mi mamá dejó de ser el centro de la escena y trata de descansar un poco de tantas emociones.
Los doctores me palpan, me miden, me revisan exhaustivamente, me observan. Todo bajo la atenta mirada de mi papá.  Yo trato de ofrecerles mi mejor perfil y hago mi mayor esfuerzo para que mi llanto sea lo más melodioso posible.  
Pero, de repente, mi papá se desmaya... Me dejan a un lado y empiezan a atenderlo a él. Mi mamá se estira como puede para mirarlo (a él). Los doctores se preocupan, le preguntan si está bien, lo ayudan a sentarse, llega una enfermera, vuelven a preguntarle...
Trato de decir algo, de impostar un "aquí estoy". Pero no vale la pena. Ya nadie me escucha...
Camila

No hay comentarios:

Publicar un comentario